Conjuntivitis, irritación ocular, verano y coronavirus
Este verano estamos teniendo un incremento, con respecto a años anteriores, de perros con irritación ocular y conjuntivitis. La causa es clara, poca lluvia y mucho sol que generan sequedad en el ambiente y más partículas en suspensión. Aunque, por el alarmante aumento de casos este año, no descartamos que uno de los factores de este incremento se deba, sobre todo en el caso de perros en ciudades, a la limpieza y desinfección de las calles.
La conjuntivitis se produce por la inflamación de la conjuntiva, la membrana transparente que rodea el ojo y lo protege. Cuando los vasos sanguíneos de la conjuntiva se inflaman es cuando se observa el ojo enrojecido y/o aumento de legaña e incluso legañas espesas de color blanco, amarillo o verdoso.
Es evidente que en el verano los casos de ojos secos se disparan ya que el calor produce la evaporación de la lágrima. Es precisamente la falta de lágrima la que produce picor y ardor a nuestros perros, que terminan por rascar la zona del ojo, llegando a producir en casos más severos graves daños en la córnea e incluso oculares.
Una vigilancia continua al color del ojo, las mucosas y las legañas es suficiente para detectar una conjuntivitis. En perros adultos la cantidad de lágrima es menor, así que, tendremos especial cuidado.
En perros braquicéfalos es recomendable un control exhaustivo ya que son muy comunes las complicaciones oftalmológicas en las razas de este tipo. Dentro de los braquicéfalos hay alrededor de 300 razas de perro y las más comunes son bóxer, bulldog francés, bulldog inglés, pekinés, carlino, lhasa apso, shar pei, shih tzu, staffordshire, bull terrier, boston terrier, entre otros.
Las conjuntivitis no se contagian de perros a humanos o viceversa.
Los síntomas más frecuentes de que nuestro perro puede padecer conjuntivitis o una irritación ocular son enrojecimiento, lagrimeo excesivo, inflamación, picor y secreciones.
Recomendaciones:
- Evita sacarlo a la calle en días muy soleados y en las horas de mayor radiación (entre las 10:00 y las 17:00). Espera al atardecer y a la mañana para esos paseos más largos.
- Presta especial atención a los ojos de tu perro en los paseos por las calles y parques recién desinfectados.
- Si vas al campo o a la playa, mantén a tu perro la mayor cantidad de tiempo posible a la sombra.
- El exceso de pelaje alrededor de los ojos es un buen lugar para el polvo y las bacterias. Recorta o mantén el pelo lejos de sus ojos.
- Limpia con regularidad las legañas del perro. Un paño humedecido en agua es suficiente aunque lo ideal es utilizar una pequeña gasa con suero fisiológico. Esto es conveniente hacerlo durante toda la vida del perro. Evitarás así la proliferación de bacterias y hongos tan perjudiciales para los ojos del perro.
- Es importante que acudas con tu perro al veterinario para que realice un exploración ocular, compruebe el estado de los ojos y determine el tratamiento o recomendaciones adecuadas.
- Pídenos consejo para mantener fresco e hidratado el ojo de tu perro. El uso de colirios, jabones, agua oxigenada, etc. por cuenta propia puede acarrear graves problemas oculares e incluso terminar en pérdida de visión y ceguera.
- Ten mayor cuidado en el caso de los braquicéfalos. Es recomendable hacer un control oftalmológico preventivo.
- No fumes en la misma estancia que tus animales. El humo del tabaco es muy perjudicial.