Día Mundial del Galgo
Desde el año 2017, el 1 de febrero se celebra el Día Mundial del Galgo, como una forma de concienciar del maltrato que sufre esta raza.
Se celebra el 1 de febrero, el día del fin de la temporada de caza, día fatídico para aproximadamente 100.000 galgos en nuestro país.
Un problema real
España es uno de los países donde más galgos se crían para utilizarlos para monterías. La gran mayoría vive en situaciones lamentables, hacinados, enjaulados y solo salen en los momentos de cazar. Acaban asesinados cruelmente o abandonados después de terminada su "juventud", cuando se consideran inútiles para la caza.
En cifras, al año se calcula que alrededor de 100.000 galgos son abandonados o asesinados.
Martha, la perrita de Paul McCartney
"Martha My Dear" es una canción de la banda The Beatles compuesta por Paul McCartney y que aparece en el doble álbum The Beatles, (1968), popularmente conocido como The White Album.
Mucha gente creyó que McCartney dedicaba indirectamente la canción de amor a su novia de toda la vida, Jane Asher, con la que acababa de romper su compromiso unos meses antes.
Realmente, la canción estaba dedicada a su perra pastor inglés "Martha". En 1997, McCartney confirmó que “Martha” la perra había sido la inspiración detrás de la canción “Martha My Dear”.
McCartney, en 1966, poco después de comprar su casa en Cavendish Avenue, compró su primera mascota, un cachorro de perro pastor inglés al que llamó Martha.
Mientras que a cualquier otra persona le parecería una canción para una chica llamada Martha, en realidad es un perro, y nuestra relación era platónica, créanme.
Paul McCartney
Martha murió en 1981 a la edad de 15 años en la casa de campo de Paul McCartney en Mull of Kintyre, Escocia. Martha dejó descendencia, uno de sus cachorros, Arrow, aparece en la portada del álbum "Paul Is Live" de McCartney del año 1993.
https://www.youtube.com/watch?v=RXawa90YU2s
Un nuevo miembro llega a la familia… Presentaciones peludas
Cuando alguien nuevo llega para instalarse en el hogar (ya sea un bebé, un niño o un adulto) es importante no olvidar el cambio que eso supone para nuestros animales.
La tenencia responsable de un animal no engloba solamente los cuidados necesarios para mantener su salud, alimentación y estímulos diarios, si no que implica el ayudar al animal a gestionar este tipo de cambios en el núcleo familiar.
Por todos es conocido algún caso de animal desplazado al llegar a casa una persona nueva: animales que antes vivían en interior y ahora están atados fuera, animales que dejan de recibir sus cuidados diarios, perros que dejan de salir a pasear, falta de asistencia veterinaria, empeoramiento de la alimentación… En muchas ocasiones, tristemente es el animal el que paga las consecuencias. Animal que nosotros decidimos meter en casa.
Debemos recordar que desde el momento en el que decidimos incluir a ese animal en nuestra familia es (o debería ser) de manera permanente y siempre con las mismas condiciones en cuanto a su cuidado. Esto nos ahorrará problemas a la hora de introducir a un nuevo miembro en casa y al animal le asegurará el bienestar que merece siempre, al margen de las idas y venidas familiares.
Entonces… ¿Cómo debemos actuar?
Siempre que un nuevo miembro se incorpora a la familia, ya sea temporal o permanentemente, conviene recordar cuatro puntos básicos a trabajar con nuestros animales que, como sabemos, eran ya miembros de nuestra familia anteriormente.
Las semanas previas.
Si nuestros horarios van a cambiar, lo ideal es acostumbrar a nuestro perro, gato, o animal que sea, a esos horarios con un poco de previsión.
Horarios de paseos, comidas, juegos, momentos de relax… Las semanas previas son ideales para ir realizando los ajustes horarios necesarios para la realización de estas actividades.
Los olores.
Cualquier persona que conviva con animales sabe lo importante que es el olfato para ellos. Por esta razón es conveniente acercarle alguna prenda u objeto que sea de la persona que se incorporará a la familia (si contamos con ella). Si no es posible, algo que el nuevo miembro vaya a usar.
La llegada.
Atiende al animal, él querrá saludarte, sobre todo si llevas unos días fuera. Puede ser el caso de una madre que vuelve del hospital con su hijo, cualquier otro miembro de la familia que hace tiempo que no está en casa y llega con un acompañante… Sea como sea, dedícale un tiempo al animal que probablemente esté deseoso de recibir tu atención y contento por verte de nuevo.
El “desconocido”.
Las presentaciones han de hacerse en un entorno relajado, con espacio, sin gritos ni tirones.
En el caso de un bebé, permite que el animal lo huela (si previamente ha podido olfatear algo suyo, lo reconocerá), que sea acerque e investigue. Si sabemos que nuestro animal es brusco o no estamos seguros del todo, podemos ponerle una correa, eso sí, nunca le daremos tirones.
Este tramo de la presentación puede durar varias etapas, dependiendo del animal, su predisposición y nuestra capacidad de gestión.
En el caso de una persona adulta, podemos hacer una pequeña presentación fuera de casa (si contamos con un pequeño jardín o finca que forme parte de la casa) para después pasar al interior. Hablar con la persona y explicarle cómo es nuestro animal puede ser de gran ayuda, pues en muchas ocasiones es esa persona la que, sin mala intención, pone nervioso al animal. Si nuestro animal no tolera bien los tonos altos, los movimientos bruscos, las caricias sin confianza, que lo agarren… Es conveniente decírselo a la persona que viene al hogar, porque no debemos olvidar que la adaptación es una cosa de dos y no un trabajo a realizar únicamente por el animal.
La calma y la paciencia en caso de no conseguir los resultados esperados son clave. No olvidemos que nuestros perro o gato lo único que desea es seguir disfrutando de su hogar y sus miembros. Trabajando estos puntos y haciendo uso de profesionales en caso de ser necesario (veterinarios, etólogos, educadores caninos…), conseguiremos casi con total seguridad una integración perfecta.
La importancia del rascado felino
El rascado felino es una conducta natural, importante y necesaria, que se inicia a partir de la quinta semana de edad y continua durante toda la vida, por lo que, es vital que tu gato disponga de una superficie adecuada para rascar.
Rosario Galtier Vallejo, DVM, MSc Etología clínica y bienestar animal, del Centro de Referencia en Medicina del Comportamiento Animal, ha publicado recientemente un artículo en la web del Grupo de Especialidad de Etología Clínica (GrETCA) de la de la Asociación de Veterinarios Españoles Especialistas en Pequeños Animales (AVEPA) en el que expone la vital importancia del rascado felino.
Rosario recalca "El rascado es una necesidad etológica felina fundamental, lo que significa que es una conducta indispensable para el bienestar de nuestros gatos. Por ello, se debe permitir que marquen el territorio con sus uñas. Sin embargo, con frecuencia la conducta de rascado es uno de los motivos principales de quejas respecto a la convivencia con gatos, sobre todo cuando el rascado se dirige hacia los muebles de la casa."
¿Qué pasa cuando rascan?
Es en la quinta semana de vida cuando el gatito empieza a adoptar la conducta de rascar. A partir de ahí cuando el rascado comienza a formar parte de su lenguaje, en concretamente de la comunicación visual y olfativa. De las glándulas interdigitales deposita mediante el rascado la feromona interdigital con la que marca su territorio. Constituye por lo tanto una señal de identificación olfativa y también visual por las marcas del rascado de gran valor para regular las relaciones sociales felinas.
Además de marca, con el rascado mantienen sus uñas en buen estado, parte fundamental tanto para la caza como para trepar, escapar y/o defenderse. A todo esto, teneos que sumar la importancia del estiramiento corporal y de tonificación muscular en el momento del rascado.
Por tanto, las funciones del rascado felino pueden resumirse en:
- Marcaje de territorio.
- Mantenimiento de uñas.
- Tonificación muscular.
¿Dónde colocamos el rascador?
Los gatos que viven en la naturaleza sitúan sus marcas en las zonas centrales del territorio, por lo que no es buena idea tener el rascador en una habitación separada del centro o escondido en una habitación. Es probable que sienta la necesidad de marcar en una zona mas abierta y central, como puede ser el sofá, un marco de la puerta o un armario.
Por lo general, el rascador se colocará en el centro territorial del gato o en la habitación donde más tiempo pasa y cerca de su lugar habitual de descanso ya que la conducta de rascado generalmente aparece después de esos periodos de descanso.
Hay que permanecer atentos y observar donde el gato quiere rascar, es precisamente en esa zona donde se recomienda colocar un rascador. En este sentido Rosario Galtier señala, “Una vez entendida la necesidad de favorecer la conducta de rascado de nuestro gato, debemos ayudarles a redirigir dicha conducta hacia objetos o elementos apropiados, sobre todo si queremos evitar arañazos en los muebles de la casa”.
Pero, ¿Qué rascador es recomendable?
Galtier nos da unas pautas a seguir para seleccionar el rascador ideal para nuestro gato entre la gran variedad de rascadores comerciales o hacerlo de manera artesanal. “Lo importante es conocer las preferencias de nuestros gatos y buscar aquellos rascadores que mejor se adapten a ellas. Sin embargo, pese a las preferencias individuales, existen algunas características generales para tener en cuenta y que nos pueden ayudar a seleccionar un buen rascador”.
Entre los factores a tener en cuenta a la hora de elegir un rascador destaca la estabilidad, el material, la orientación y el tamaño:
Estabilidad
Un rascador firme, que no se mueva y le permita rascar con fuerza. "Además, los gatos más temerosos podrían asustarse", asegura.
Material
Sabemos que las superficies preferidas de los gatos son la cuerda, el cartón, la madera o superficies como la moqueta. Podemos ofrecer una rascador con variedad de materiales. Importante disponer las fibras en sentido vertical ya que así facilitará el rascado y será una forma de que a nuestro gato le resulte más atractivo.
Orientación
Cómo en el caso de la disposición de las fibras, la gran mayoría de gatos prefieren los rascadores verticales. Sin embargo, algunos gatos prefieren rascar en superficies horizontales o inclinadas.
Tamaño
A los gatos les gusta dejar marcas en zonas altas, por lo que el rascador de buen tamaño le resultará más atractivo.
Una buena medida es que, al menos, la superficie a rascar sea mayor que la longitud de nuestro gato con las patas estiradas. Esto facilita la comodidad para rascar y sobre todo la tonificación muscular al realizar los estiramientos después de los descansos.
¿Uno o más rascadores?
Tal y como señala la experta, podemos tener varios rascadores que cubran las tres funciones de la conducta de rascado felino: "Podemos tener varios rascadores, cada uno para cubrir una función diferente. Asimismo, podemos elegir un modelo concreto en función del objetivo que queramos cubrir y del espacio que tengamos en nuestra casa. Por ejemplo, las torres con rascador permiten que los gatos duerman en la zona alta y, al despertar, se rasquen en la parte de abajo. Si no tenemos espacio en el salón para colocar una torre para gatos y a nuestro gato le encanta dormir en el sofá, podemos colocar rascadores planos en los laterales del sofá”, señala.
Mi gato rasca por todas partes menos en el rascador
En ocasiones el gato no marca en el rascador que le colocamos o incluso deja de hacerlo en su rascador habitual para extender el rascado por otras zonas de la casa, incluyendo los muebles, el sofá, etc. Tenemos que observar la conducta de nuestro gato y ver que es lo que ha cambiado. En ocasiones esta conducta nueva indica un estrés. También algunas de estas conductas vienen generadas por problemas en la interacción social entre gatos, cuando conviven varios gatos en el mismo territorio e incluso cuando detectan gatos alrededor de su territorio. Es importante observarlo y detectar si han aumentado las conductas de rascado de superficies e incluso de marcaje con orina.
Ojo a la persecución cuando rasca en lugares inadecuados!, el gato interpreta que rascar en determinados lugares tiene como consecuencia una mayor atención hacia el. que lo persigamos y juguemos con el.
¿Qué hacemos para evitar que siga rascando donde no queremos que lo haga?
Primeramente limpiar la zona a ser posible con detergentes enzimáticos. Un detergente enzimático es un producto que combina agentes limpiadores con enzimas que contribuyen a eliminar determinados microorganismos.
Al gato no le gusta rascar en papel de aluminio ni en plástico, podemos cubrir la zona con alguno de ellos para que deje de resultarle atractiva la zona de rascado.
Evitamos también el castigo y facilitamos la conducta de rascado añadiendo rascadores adecuados, a poder ser, cerca de los lugares donde tiende a rascar.
Para favorecer el uso de los rascadores podemos utilizar el catnip o hierba gatera (también conocida como menta de los gatos o albahaca de gatos) que es la planta de la que se enamoran dos de cada tres gatos, cuando perciben su intenso olor mentolado.
Otra técnica que ha demostrado efectividad es la de pintar con un rotulador líneas verticales sobre el rascador.
Si después de todos estos consejos y técnicas todavía detectas un comportamiento extraño, es probable que el gato tenga un problema no relacionado con todo lo anterior. Te aconsejamos acudir a un veterinario que examine a tu gato.
En Canido veterinario contamos con Estefanía Rubirosa, nuestra veterinaria especialista en medicina felina que estará encantada de revisar al felino para averiguar las causas de su comportamiento y aportar soluciones para el bienestar del animal.
Más información sobre Rosario Galtier y el Grupo de Especialidad de Etología Clínica (GrETCA) en https://gretca.com/
Los beneficios de vivir con un gato
Convivir con un animal está lleno de beneficios.
Un gato, un perro o cualquier otro animal del que nos encarguemos a través de un cuidado responsable nos brindará a nosotros, siempre, mucho más de lo que le damos (un hogar, comida y cuidados).
Desde AniCura Canido Clínica Veterinaria os mostramos un puñado de razones por las que convivir con un felino está lleno de ventajas.
Ahí van!
El ronroneo.
Diferentes estudios confirman que ese sonido tan característico de los gatos es beneficioso para nosotros y nos ayuda a relajarnos.
Calman nuestro sistema nervioso.
Compartir tiempo con tu gato calma el estrés y nos entretiene de una forma muy positiva.
Convivir con un animal como un gato y pasar tiempo con él (jugando, acariciándolo u observándolo) nos mantiene centrados en el presente y este pequeño detalle es fundamental para apartar nuestra mente de la vorágine del día a día.
Nos ayudan a superar estados anímicos poco deseables.
La ansiedad y la depresión están a la orden del día debido al sistema en el que vivimos. Los animales, y en este caso que nos concierne los gatos, ayudan a sus dueños a mantener una rutina, a cuidarlos y a interactuar con ellos. La tranquilidad que irradian los gatos y los cuidados que deben darles sus dueños hacen de ellos un compañero perfecto para ayudar y animar a aquellas personas que no pasen por un buen momento.
Nos ayudan a paliar la soledad.
Otro gran mal de nuestro siglo, que de nuevo los animales nos ayudan a sobrellevar. Nuestro estilo de vida y sociedad son propicios a que cada vez más personas sufran de soledad.
El amor incondicional de los gatos, su presencia tranquila, la convivencia con ellos… Todos estos aspectos han originado que diferentes estudios (así como el centro americano de prevención de enfermedades) los recomienden como nuestros mejores aliados.
Como podemos ver, ellos siempre nos darán mucho más de lo que podemos darles nosotros. Es nuestro deber cuidarles como merecen, para que ellos puedan seguir regalándonos todos sus beneficios.
Cuidados felinos durante el otoño
Sí, sabemos que aún quedan unos cuantos días de verano y hay que aprovecharlos al máximo, pero es una realidad que el otoño está a la vuelta de la esquina. Por este motivo, desde AniCura Canido Clínica Veterinaria os traemos unos cuantos consejos sencillos para no descuidar el bienestar de tu gato al comienzo de la nueva estación.
Cuida su pelaje
Es probable que durante el otoño tu gato haga una muda de pelo, por lo que una buena higiene y cepillado nos ahorrarán mucho trabajo a la hora de limpiar pelo por la casa y él ganará en comodidad.
Bolas de pelo
Debemos prestar especial atención a las bolas de pelo que ingiere el gato como resultado de acicalarse, que serán probablemente más numerosas en las épocas en las que se produce la muda.
La lengua rugosa de los gatos funciona como un “peine”, arrastrando con ella el exceso de pelo muerto. Estas bolas de pelo normalmente se eliminan con las heces pero, en algunas ocasiones, pueden provocar vómitos o causar problemas intestinales
Un cepillado adecuado, una alimentación apropiada y, quizá, el uso de malta, pueden ayudarnos y ser unas fabulosas herramientas a la hora de cuidar este aspecto de nuestro animal.
Llega el frío
Observa la temperatura de tu hogar porque, aunque tú pases menos tiempo en casa, puede ser que tu gato necesite ya una mantita o algún complemento que suela utilizar en las estaciones frías.
No descuides el ambiente
Poco a poco se va notando: las horas de luz menguan, el brillo del sol ya no es tan intenso… Si nosotros podemos sentirlo, ellos también. Con el cambio de estación es probable que paulatinamente retomemos nuestra rutina (trabajo, obligaciones varias, vuelta al cole, actividades…) y pasemos algo menos de tiempo en casa en comparación con el período vacacional.
Para que estos factores no perjudiquen el ambiente casero en el que vive tu gato, trata de mantener unas buenas condiciones de luz en tu hogar: no cierres las persianas o cortinas a cal y canto, permite que tu felino pueda aprovechar las horas de luz aunque tú no estés en casa con él.
Y al llegar a casa… No te olvides de que existe, a pesar de haber vuelto a tus preocupaciones, rutinas y ajetreos diarios. Ellos siempre están ahí, esperándonos.
Almohadillas y calor
Con la llegada del verano, las temperaturas suben y aunque este no sea un lugar especialmente caluroso sí que hay jornadas con temperaturas altas y horas del día que es conveniente evitar si queremos cuidar de las almohadillas de nuestros animales. Si viajas con tu animal a lugares en los que hace más calor, también es recomendable tener en cuenta estas pautas.
Transitar una zona muy caliente (en especial si es cemento o asfalto) puede provocar quemaduras en las almohadillas del animal. No te guíes por tu percepción del calor, recuerda que tú vas protegido con tu calzado, sin embargo, el calzado de nuestro animal son sus propios pies desnudos.
Si vives en una ciudad, tu animal es más propenso a padecer quemaduras en sus almohadillas ya que el calor sumado al cemento son la combinación perfecta para provocar quemaduras.
Desde AniCura Canido Clínica Veterinaria te recomendamos que intentes evitar las horas centrales del sol. Ten especial cuidado los días de calor.
Es también una buena idea disfrutar con tu animal de zonas verdes y arboledas. Hará menos calor y el terreno es más amigable.
Recuerda hidratar correctamente a tu animal, especialmente en los días de calor.
Si aún así tu animal sufre quemaduras en sus almohadillas, por favor, no lo trates en casa con ungüentos, trucos caseros o cremas para humanos. Las quemaduras son muy dolorosas y desembocan muy fácilmente en problemas más graves e infecciones. Acude a tu veterinario, allí le proporcionarán tratamiento y alivio de manera sencilla.
Y por último…
¿Conoces la prueba de los cinco segundos?
Si quieres comprobar si ese asfalto que tienes delante de ti en un día caluroso es apropiado para tu animal, coloca el dorso de tu mano sobre el suelo. Si no puedes aguantar tranquilamente durante más de cinco segundos es una señal clara que te indica que tu animal, muy probablemente, sufrirá quemaduras en sus almohadillas.
Cambia de itinerario o de franja horaria para que los dos, tu animal y tú, podáis disfrutar de ese merecido paseo juntos.
No mientas al veterinario ?
«Sí que está vacunado pero perdí la cartilla», «el chip se lo pusieron de cachorro pero se le debió de caer», «no le doy de mi comida», «está gordo pero no será porque no salgo a correr con él todos los días!»… Y así, una tras otra...
De las anteriores afirmaciones, podríamos casi asegurar que el 85% son mentiras (o el 99%). No pasa nada, no hay que dar al vererinario más explicaciones que las necesarias, pero, en ocasiones, estas "medias verdades" pueden influir negativamante en el diagnóstico de determinadas enfermedades o patologías.
Los animales no pueden comunicarse con el veterinario, y por ello no pueden ofrecernos detalles de su día a día. Detalles tan importantes como la dieta, lo último que ha comido, si lleva una vida sedentaria, si lleva una alimentación saludable o si se ha puesto ciertas vacunas.
Tanto la cartilla como los informes y los datos clínicos, nos aportan mucha información de utilidad a la hora de tratarlos, pero, en múltiples ocasiones, los animales acuden a otro veterinario por diferentes motivos, buscando una segunda valoración, por desplazamiento, por descontento, etc etc. Esto a priori no supone ningún problema, es importante acudir con la cartilla y todos los datos posibles ya que arrojan mucha luz a la hora de diagnosticar, tratar y/o medicar.
Así que recuerda, trae la cartilla, si tiene, aunque sea con una sola vacuna (o ninguna), cuéntanos lo que te preguntemos, sin medias verdades. Estarás favoreciendo nuestro trabajo y atención y lo mejor, estarás haciendo un gran favor a tu mascota.
La gravedad del cáncer de Mama en perras y gatas
Cada 19 de octubre se celebra en el mundo el Día Internacional del Cáncer de Mama, con tal motivo, se busca sensibilizar y concienciar a las personas de todo el mundo sobre la importancia de realizarse un examen de mamas con regularidad con la finalidad de detectar cualquier signo o anomalía. Lo mismo para nuestras mascotas.
Es importante conocer las cifras del Cáncer de Mama para darnos cuenta del alcance de esta enfermedad en perras y gatas.
Según la VSSO (Sociedad Veterinaria de Oncología Quirúrgica), los tumores en gatas representan el 17% de tumor más común, siendo el 90% de ellos, malignos.
Los tumores mamarios son el tercer tumor más común en gatos y representan el 17% de todos los tumores en gatas.
Predisposición de raza: gatos doméstico de pelo corto y siamés.
Edad media 10-12 años (rango, 9 meses a 23 años).
Los gatos siameses se asocian con tumores mamarios a una edad más temprana y con una mayor tasa de invasión linfática.
Los tumores mamarios en gatos suelen ser malignos (85% -93%).
El 80% de los tumores mamarios felinos son adenocarcicomas con los subtipos tubular, papilar, sólido y cribiforme más comunes.
80% tiene metástasis en el momento de la eutanasia.
Sitios metastásicos: ganglios linfáticos, pulmones, pleura, hígado, diafragma, glándulas suprarrenales, huesos y riñones.
La metástasis esquelética es más común en las extremidades distales que en la proximidad del codo o la rodilla como en los perros.
En las perras se dispara más la aparición de tumores, representa el 42% de tumor más común, de los cuales, más de la mitad, el 52% son malignos.
Los tumores mamarios son el tumor más común en las perras y representan el 42% de todos los tumores y el 82% de los tumores reproductivos.
Edad media 6-10 años y rara <4 años
Predisposición de raza: Pointer, el Setter irlandés, el Spaniel bretón, así como el springer Spaniel inglés, el Labrador retriever, Mastín de los pirineos, el Samoyedo, el Airedale terrier, el Caniche toy y caniche miniatura, el perro salchicha y el Keeshond.
Los tumores mamarios en perros machos suelen ser malignos.
Los tumores mamarios múltiples son comunes: 672 hembras Beagles enteras seguidas durante toda su vida, con un 71% con al menos 1 tumor mamario y un 61% con> 1 tumor mamario.
Recomendaciones
Desde AniCura Canido Clínica Veterinaria no nos cansamos de repetir que el mejor tratamiento es la prevención. Siempre.
Nuestra recomendación es clara. En cachorras (y cachorros) castrar en su primer año de vida, ya que se reduce bruscamente la posibilidad de apariciones de cáncer de mama u otro tipo.
En caso de no estar castrada, en AniCura Canido Clínica Veterinaria, a cada perra o gata que acude a revisión rutinaria o a vacunarse, realizamos unos controles rutinarios de palpación y observación de glándulas mamarias.
¿Cómo podemos detectar tumores?
La forma más sencilla de detectar cáncer de mama es la palpación de todas las mamas. La aparición de algún bulto extraño, secreción o herida en una o varias mamas, por insignificante que sea, debemos consultarlo al veterinario a la mayor brevedad posible. El tiempo es fundamental para evitar una metástasis.
En ocasiones, la apatía, falta de energía y apetito o una respiración anormal puede ser un indicativo, aunque no notemos bultos extraños.
Tratamiento
Sí se ha detectado alguna anomalía en las glándulas mamarias es fundamental hacer las oportunas pruebas. Por normal general, un análisis de sangre, una biopsia y radiografía nos darán las claves exactas de la gravedad del tumor.
Detectado el tipo de tumor y gravedad, el veterinario toma las decisiones oportunas que, generalmente, suelen derivar en la combinación de cirugía, lo menos invasiva posible combinada con quimioterapia.
Recuerda, el mejor tratamiento es la prevención.
Enfadarme con mi perro
Llegas a casa y hay un pis en la cocina, o un arañazo en la puerta, o una almohada, alfombra o cojín roto… ¿Qué hacer, pero sobre todo, qué NO hacer cuando nos encontramos ante este tipo de situaciones en la conducta de nuestro perro?
Lo primero que debemos saber es que los perros aprenden por asociación. ¿Qué quiere decir esto?
Que si le riñes cuando llegas a casa y la almohada la ha roto tiempo atrás, el animal no entenderá absolutamente nada.
Y cuando decimos absolutamente nada, es eso.
Verás que el animal se pone en posición de sumisión, que agacha la cabeza y desvía la mirada… Y es en esos momentos cuando el dueño aprovecha para decir: “¡Mira qué bien me ha entendido! ¡Mira cómo sabe perfectamente lo que ha hecho!”.
No… De nuevo tenemos que decirte que esa frase que la mayoría de nosotros hemos pronunciado alguna vez no es cierta, en absoluto.
El animal, lo único que entiende, es que te estás enfadando con él. Pero no entiende el PORQUÉ.
Y como lo único que entiende es que te estás enfadando, reacciona enviando señales de calma y sumisión, para mitigar tu enfado. Pero, insistimos, no entiende el porqué del enfado. Solamente te ve a ti enfadado. Lo cual es algo difícil también para él, porque el perro intenta constantemente hacerse entender contigo, y en ese momento no lo está consiguiendo, de ahí que enviarte señales de calma y sumisión sea la única forma que tiene para tratar de terminar el conflicto.
Lo que nosotros debemos saber:
Cuando reñimos a un animal pasado un tiempo desde que sucedieron los hechos que nos han molestado, debemos ser plenamente conscientes de que el animal no está aceptando su culpa ni aprendiendo en absoluto de la situación, no porque no quiera, si no porque no lo entiende.
¿Es probable que, en algunas ocasiones y tras riñas de este tipo, el animal deje de hacer eso por lo que se le riñe? Es posible, pero debemos tener muy claro que, en estos casos, esos animales dejan de hacer lo que hacen movidos por el miedo o por su intención de no generar conflictos, no porque hayan entendido nada.
Entonces, ahora que sabemos esto… ¿Qué podemos hacer?
Lo primero que debemos sabes es que, como seres sociales, tanto perros como humanos utilizamos el enfado para mostrar nuestro desacuerdo ante determinadas situaciones. Pero debemos tener muy claro que, tanto en un grupo de humanos como en un grupo de animales, como en uno mixto, el enfado no es la base de la educación para el buen funcionamiento del grupo.
Nuestro perro se esfuerza, cada día, por saber lo que queremos de él, pues desea nuestro cariño, y eso nos hace plantearnos que debemos de ser justos a la hora de relacionarnos con él. Nuestras formas de comunicación son completamente distintas. Partiendo de ahí, una educación basada en el cariño, en el entendimiento, en correcciones puntuales y al momento, sin intimidar al animal, y en el refuerzo positivo, nos ayudarán a poder relacionarnos con él de la mejor manera.
En el blog hay varios post en los que diferentes expertos nos enseñan cómo convivir de la manera más saludable con nuestro perro, y también puedes pedir ayuda externa (veterinarios y educadores) ante situaciones que te sobrepasen.